Coaching y Psicoterapia

Consideremos ahora la siguiente definición:
"La psicoterapia es un proceso orientado al cambio que se da en un contexto de un contrato de relación profesional empático y facultativo. Su justificación explícita o implícita se enfoca sobre la personalidad del cliente, la técnica psicoterapéutica o ambas. La permanencia del cambio se ve afectado por multiples aspectos de la vida del cliente. El proceso es idiosincrático y determinado por la interacción de las posturas preconcebidas del paciente y del terapeuta".2

Esta nos presenta un panorama más complejo que la primera definición pues incluye más elementos comunes con la definición de coaching que he presentado previamente. Ambos procesos …

• Están orientados al cambio.
• Se habla de un contrato al igual que en el coaching.
• Ambos son procesos idiosincrásicos.

• Determinados por la interacción de las posturas de ambas partes. En relación a este punto podríamos argumentar que en coaching es la postura del cliente (agenda) la que marca el derrotero de la interacción más considero que sería una visión muy ingenua el pretender que el coach no tiene ciertos elementos preconcebidos, como ya indique que sucede en la terapia.

Como se ve, en esta segunda definición existen más elementos en común entre ambos procesos haciendo más difícil diferenciarlos; algunos puntos que si se mantienen distintos son:

El enfoque primario de la psicoterapia es en relación a un cambio más de tipo remediativo que de empoderamiento.

La técnica se refiere a los procesos específicos que sigue el terapeuta para ayudar a su cliente. Una diferencia clara sería que en coaching no existen las técnicas (más ICF si marca que es posible el empleo de algún proceso en particular con el consentimiento previo del cliente); pero algo que habremos de considerar es que la ausencia de técnicas en un proceso de ayuda no es privativa del coaching y es más del enfoque Centrado en el Cliente propuesto por Carl Rogers.
Otros aspectos que hacen difícil la distinción son: Coaching parte de propuestas surgidas en el campo de la psicoterapia, particularmente en la psicoterapia humanista; algunas de las premisas de este modelo que guardan una gran similitud con el coaching son:

A mi parecer, el proceso de coaching mantiene una clara relación y, me atrevería a afirmar que se ha basado en las premisas del modelo humanista, particularmente del Enfoque Centrado en la Persona. Más que buscar marcar una distancia con este modelo mi postura es dar un crédito claro o reconocer las similitudes en las premisas existentes entre ambos modelos.

Algo a notar aquí es que aún cuando el modelo humanista pretende acrecentar la parte sana de la persona termina centrando su atención en aspectos deficitarios, al grado tal que en Francia se les llamaba a los terapeutas humanistas “los niños perdidos del psicoanálisis.”

Otros aspectos que hacen aún más difícil distinguir y respetar los campos de acción de ambos procesos son:

Empleo de habilidades básicas para una relación de ayuda llámese psicoterapia, counseling, coaching
Rapport
Escucha activa
Reencuadres
Empleo por parte de los coaches de procesos y técnicas desarrolladas por modelos particulares de psicoterapia como son:
Procesos Cognitivo-conductuales
Trabajo corporal
Eneagrama
PNL
Involucración de procesos de coaching a partir de escuelas de psicoterapia, algunos de ellos son:
Coaching cognitivo-conductual
Coaching eriksoniano
Coaching no directivo (tomado del nombre que C. Rogers dio originalmente a su modelo terapéutico) y ahora denominado Coaching Humanista.
Coaching sistémico
Coaching estratégico
Coaching transgeneracional
Coaching y constelaciones familiares

Y un largo etcetera de nombres que pareciera indicar que a quien los promueven ignoran que están mezclando premisas que se contraponen.

Sin duda es posible que a través del coaching, un coach con poco sentido ético o con un desconocimiento de los límites de su profesión realice intervenciones ante situaciones que corresponden más a la psicoterapia y haya salido bien y eso refuerce su tendencia a querer emplear el coaching para asuntos ajenos al mismo es claro que esta invadiendo un campo de acción para el cuál no se encuentra cualificado.